Más de un millón de civiles en la región al norte de la Franja de Gaza enfrentan una amenaza inminente.
Esto ocurrió después de que las fuerzas armadas de Israel ordenaron la evacuación de esta zona fronteriza en un plazo de 24 horas.
Esto en respuesta a los ataques de Hamás y en previsión de un inminente bombardeo.
«La evacuación de todos los civiles de la Ciudad de Gaza de sus casas hacia el sur por su propia seguridad y protección. Moverse al área al sur de (la quebrada) Wadi Gaza», dice el comunicado emitido por el ejército israelí.
REPERCUSIONES DEVASTADORAS
Aproximadamente 1.1 millones de habitantes residen en la zona septentrional de Gaza, adyacente a Israel.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha instado a revocar esta decisión y ha alertado sobre las posibles repercusiones «devastadoras».
“Los responsables de la ONU en Gaza fueron informados por sus oficiales de enlace del ejército israelí que la totalidad de la población al norte de Wadi Gaza debía ser reubicada en el sur en 24 horas», indicó Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU.
“Las Naciones Unidas piden con firmeza que, de confirmarse, se anule cualquier orden de este tipo, evitando lo que podría transformar lo que ya es una tragedia en una situación calamitosa. La ONU considera imposible que este movimiento tenga lugar sin consecuencias humanitarias devastadoras», agregó.
Desde el inicio de los conflictos el 7 de octubre, a raíz de un violento ataque del movimiento islamista palestino Hamás, se han registrado aproximadamente 1,200 fallecimientos en Israel, principalmente de civiles.
En la Franja de Gaza, las intensas operaciones de bombardeo por parte de Israel, han resultado en un total de 1,417 fallecidos, entre los cuales se cuentan un gran número de personas civiles, según las autoridades locales.