La presidenta de Perú, Dina Boluarte, ha revelado detalles sorprendentes sobre su conocimiento del polémico pago de 41 millones de soles a la empresa Aionia Technology Corporation SAC. Boluarte admitió que se enteró de este pago a través de los medios de comunicación en marzo pasado, lo que plantea preguntas sobre la transparencia gubernamental en el país.
La Fiscal de la Nación, Patricia Benavides, indagó sobre los argumentos proporcionados por el entonces ministro de Trabajo, Luis Adrianzén, y el presidente de EsSalud, Arturo Orellana, en relación con el pago. Adrianzén aseguró que el pago era «regular,» mientras que Orellana argumentó que se trataba de un laudo arbitral inapelable y, por lo tanto, el pago era ineludible. Boluarte expresó su interés en que el equipo técnico de EsSalud explicara por qué consideraban irregular este caso.
En respuesta, Boluarte convocó una reunión con el titular de EsSalud y su equipo técnico, donde les indicó que no se realizarían más pagos de deudas similares. También reveló que los representantes de EsSalud habían informado a la Fiscalía sobre el laudo arbitral en dos ocasiones, pero no habían recibido respuesta, lo que aparentemente los llevó a realizar el pago de 41 millones de soles.
La Fiscalía también cuestionó a Boluarte sobre chats de WhatsApp en los que funcionarios del Ministerio de Trabajo coordinaron el pago realizado por EsSalud. La presidenta reveló que había visto una conversación en el teléfono celular del presidente de EsSalud, aunque no recordaba el contenido ni la fecha exacta de la comunicación.
Finalmente, Boluarte fue cuestionada sobre las funciones de su exasistente, Grika Asayag O’besso, en el despacho presidencial. Negó su participación en reuniones con ministros u otros titulares ejecutivos de dependencias estatales.
